Mientras tú disfrutas de tu pensión de divorciado de pocos años otros seguimos de luto y pacientes voluntades aguardamos. Qué rápido y conscientes celebran lo que para unos son desgracias y en grandes fiestas las convierten hallando santo al que dar las gracias. *** Qué querrá un padre que siempre ha antepuesto la vida de lo opuesto al calor que mejor arde. Qué buscará un abuelo que de horarios no se preocupa y llama en clase sin disculpa a sus nietos una vez al año. Fácil lava su conciencia quien de ella carece a quien nunca le escuece a quien le importa un carajo. Pero demostrado está que cuando una pensión es la única preocupación por encima de la vida... ...¡todo dicho dejó el cabrón!