Dicen que en O Milladoiro no hay nada que ver ni interesante de fotografiar, pero gran parte de mi fotografía urbana está localizada allí, a excasos doscientos metros de mi casa. Como esta instantánea (jpg directo de la Em10 MkIII con mi 17mm) que no pude resistirme a quitar hace apenas un par de horitas.
Esta versión es un revelado simple de los que acostumbro a realizarle a mis capturas. No soy de pasarme horas ante una imagen. El ejercicio trata de devolver la ilusión de fotografiar con cámaras digitales, ya que no nos quitan la ilusión ni la emoción de la fotografía directa ni siquiera se contradice con el purismo.
¿Deja de ser escritor aquel que uda una computadora? ¿Acaso una estilográfica hace purista al literato? Pues entonces habría que pensar en novelar en tallas sobre piedra.
Comentarios
Publicar un comentario
Déjame aquí tu comentario.